¡Bienvenid@s!

x Historia x Join & Rules x Fan Fics and Arts x

 

~ Participantes ~

~ Clérigos ~


 


~ Exploradores ~

 

~ Agradecimientos ~

x A mi Germaneta Lorena por ayudarme con el diseño y blogger y ayudarme a no dejar esto abandonado.
x A Kao por hacerme los avatares, por sus consejos y por su apoyo constante
x A Bunny por ayudar también con el diseño y animarme.
x Y a todos los que seguís participando en el RPG,

¡Gracias!

~ Tag Board ~

 



sábado, agosto 18, 2007










Estaba sentado detrás de mi mesa, poniendo en orden algunos papeles, pero mi cabeza no estaba en lo que ocupaba mi tiempo, pensaba en mis hermanos, Kyle y Gin, y también en Lucius, y en el ladrón.

¿Como va a afectar todo esto al pueblo?

Si la noticia se divulgava demasiado, podía provocarse una abalancha de católicos cegados por la codicia intentando encontrar el Santo Grial, no puedo permitirlo, yo soy el representante de el señor en la tierra, todo tiene que estar bajo mi control, yo tengo que controlarlo todo, por eso soy el Santo Pontífice..

Estaba sumido en mis pensamientos, mientras fingía leer las solicitudes para entrar en la Santa inquisición, cuando llamaron a la puerta.
-Adelante.-dije sin levantar la cabeza de los papeles.
-Su santidad..-dijo una voz medio tímida.
Levanté la cabeza y vi a uno de mis hombres en el humbral de la puerta.
-¿Que ocurre?-dije impacientándome.
-Nos ha llegado informacion sobre un párroco que esta cometiendo alguna serie de irregularidades para con la religion de nuestro señor jesucristo.
-Sigue.-dije apenas sin mirarle.
-Se trata de Crowley Adams señor... Él...
-No tengo todo el día Christoffer.-dije metiéndole prisa.
-Ayuda a los herejes.
-¿Qué?-dije levantándome de la mesa.-¡Repite eso!
-Dice que no es partidario de ocmo tratamos a los acusados de herejía y se interpone en las misiones de la Inquisición.
Entrecerré los ojos y volví a sentarme entrelazando las panos sobre la mesa, colocándolas a la altura de mi barbilla.

Ese Corwley... ¿es realmente una amenaza para mí? Sólo hay una forma de averiguarlo.

-Traédmelo, quiero que se presente ante mí inmediatamente.-ordené con frialdad.
-¿Y si se niega señor?-preguntó.

Estúpido...

-Desde hoy quedas excomulgado.-dije con una voz gélida.
-¿Que? Pero su santidad, yo... no puede... ¿porqué?
-¿Porque?- dije impasible.-Yo no tneog porque darle explicaciones a nadie, pero mira, hoy me siento generoso, te diré porque... NADIE cuestiona mi palabra, y NADIE puede dudar de que si yo ordeno algo, esa orden se va a cumplir.-hice una pausa y le miré, Christoffer me miraba casi sin creerse mis palabras, hasta que una lágrima calló por su rostro.
-Señor... se lo suplico...-dijo sollozando.
-Aléjate de mi vista.-dije con desprecio.-Si en dos horas no estas a menos de 20 km de aquí... Te arrepentirás, te lo aseguro.
Christoff comenzó a gritar y sollozar, hasta que dos miembros de la inquisición vinieron alertados por los gritos, yo firmé su excomunion y ordené que lo sacaran de allí. Ese incompetente no volvería a pisar una iglesia...

Poco después, alguien tocó a la puerta.
-Adelante...-repetí de la misma forma monótona y automática que antes, sin levantar la cabeza de los papeles.
-Su Santidad-dijo Lucius, entrando con paso rápido y firme. Sonreía, y traía una pequeña caja consigo.
Levanté la cabeza y le miré con curiosidad.
-Hola Lucius, por tu cara diría que traes buenas noticias.
Se acercó, dejó la caja sobre mi mesa con cuidado y me besó el anillo. Luego habló.
-He cumplido mi misión sin problemas-dijo satisfecho-.Aunque...-y ahí dejó de sonreír-quizás todas las noticias no sean buenas.
-Cuéntamelo todo.-dije mirando la caja.-¿Qué contiene esta caja?
-La caja, Su Santidad, contiene...-hizo una pausa más bien dramática-...el pergamino robado. El ladronzuelo...quiero decir, hereje, era un chico joven...de buena familia. Sin embargo, se dedicaba a...esas..."artes oscuras", medicina, alquimia, química... con un grupo de amigos.
Abrí la caja mientras le escuchaba.
-Continua.
-Todos ellos han sido...convenientemente redimidos...Pero...-había algo que Lucius no sabía cómo decir-pero...
-Pero que Lucius.-dije levantando la mirada y clavando mis ojos en él.
-Ellos...-desvió su mirada-...ahora este pergamino no es el único...Hay...copias manuscritas. Muchas. Quemamos montones, junto con la casa, pero aún así...

Me quedé en silencio un momento. Luego miré a Lucius.
-Esta bien, tenemos que actuar, hay que poner a la inquisición al corriente, y hay que convencer a los mejores cardenales para que colaboren.-dije con firmeza.-¿Te encargas de ello? Yo estoy esperando una visita.
-¿Los cardenales...?-preguntó casi para el mismo-.Buena idea, Su Santidad. Sí, les pediré apoyo. Al mismo tiempo hablaré con los Inquisidores.
-Una cosa, no cuentes con Christoffer Buonardino.-dije secamente.
-¡Dios no lo quiera!-aunque a él no parecía importarle demasiado-¿Le ha ocurrido alguna desgracia?
-Esta excomulgado.-dije como si nada.
Lucius no dijo nada. Se había quedado sin palabras, me miraba atónito.

Pasé a narrarle lo que me había contado de Crowley Adams y su descaro al no obedecer mis ordenes.
Incluso después de ello, mi camarlengo seguía mirándome confuso. Finalmente, optó por agachar la cabeza:
-Vuestra sabiduría es insondable. No dudaré de vuestras nobles razones para excomulgar al antiguo cardenal.
-Tu eres de las pocas personas que pueden cuestionarme algo Lucius, quizá fui demasiado extremista, pero no necesito incompetentes a mi lado en estos momentos.
-¿Podría...-comenzó Lucius, eligiendo las palabras con cuidado-...recomendaros precaución? Quizás perdonar a monseñor Christoffer muestre vuestra magnanimidad...Un soberano piadoso es amado por su gente.
Lo pensé un momento.
-Eres la persona mas sabia que conozco Lucius... Pero ¿No crees que si perdonara a Christoffer mostraría un carácter blando o débil?-dije mirándole.
Lucius levantó la cabeza y sonrió, animado.
-¡Por supuesto que no! Christoffer se sentirá tan aliviado que cumplirá con sus obligaciones con el doble de energía...y nos evitaremos buscar a otro cardenal...Algo que podría retrasarnos ahora mismo.
Me froté la barbilla.
-Esta bien, retiraré la excomunión de Christoffer, pero es la única vez que lo voy a hacer, y únicamente lo hago por la situación tan complicada en la que nos encontramos.-dije.-Ahora retírate, comunícale a Christoffer mi decisión y ponte con la búsqueda del apoyo de los otros cardenales.-Hice una pausa.-En cuanto haya recibido al tal Crowley Adams te informaré de inmediato.
Hizo una reverencia.
-Como deseéis, Su Santidad. Una última cosa: ¿Debo actuar en secreto o las nobles acciones de la Inquisición y los Cardenales han de hacerse públicas?
-Por el momento cuanta menos gente lo sepa mejor. Si ha de hacerse publico, creo que no es el momento apropiado todavía.
-Gracias.-dije volviendo a dirigir mi atencion a los papeles de mi mesa.
Escuché un leve rocé de ropas, y cuando volví a levantar la mirada, Lucius ya no estaba.

*OUT* Post de Su Santidad, Crowley te estoy esperandoo muajajaja xDDD espero ke os guste ;) y gracias a kaori por ayudarme tk!! *OUT*