Plasme mi firma en uno de los papeles que estaba sobre mi escritorio, era la carta de expulsion de una de las hermanas del convento, la muy impia habia sido sorprendida regalando comida a una familia de indigentes y, segun los reportes, la madre era prostituta años atras. Nuestro señor no permite que le extendamos la mano a pecadores.
Una hermana llamo a mi puerta.
- Madre Superiora, el Cardenal Flowright ha venido a visitarla.
Abri mucho los ojos.
- Pues hazlo pasar, insolente! No lo hagas esperar!
- Si mi señora.
Entonces aparecio el Cardenal en el umbral de la puerta.
- Su excelencia, Cardenal Flowright! -exprese asombrada, levantandome de mi asiento y reverenciandolo.
El con la mano en la que no sujetaba su vara hizo un gesto de modestia.
- No hace falta tanto respeto querida Dolores, hay confianza- me dedico una sonrisa típica en el.
- Gracias maestro. Es un honor tenerlo aqui.
-Veras... se me encomendo una misión por orden de mi he... del Papa-rectificó su error
- Una mision maestro? -pregunte alzando una ceja- Puedo servirle en algo?
- Por supuesto, por eso me encuentor aqui- sonrío- me gustaria obtener información sobre cierta persona a la que busco... y me encantaría que me acompañaras en dicha mision.
- Sera un honor maestro.
-Y... no me llames maestro, simplemente Kyle, querida Dolores.- añadio el maestro con dulce voz.
Esa voz que hipnotiza...
- Si Kyle -conteste casi sin pensarlo, cuando el maestro hablaba de esa manera... sus palabras simplemente no podian ser desobedecidas.- A quien busca la Iglesia?
- Bien...- prosiguió sentándose en las silla mas cercana a mi escritorio- Busco a un famoso predicador, llamado Cain... Pensé que quizás aquí en el convento tuvieras información sobre su paradero...
- Cain? -guarde silencio unos segundos, recordando su nombre- Si, he oido sobre el, es un predicador que ha convertirdo a muchos al catolicismo en cuestion de meses. Incluso en las comudades mas reacias a adoptar nuestra religion, donde otros han fallado, el ha triunfado. Se dice que habla con tal pasion que es capaz de convencer al proximo pero yo sospecho otra razon... Cree maestro... es decir Kyle, que el tenga algun tipo de poder como nosotros?
- Ummm- el maestro se quedo pensando despreocupadamente, realmente parecía un crio con ese aspecto y esa actitud-Bueno... es posible, pero no creo que convenza a la gente con su poder, si no por vocación... es admirable... quizás tenga la misma facilidad de hablar con la gente que yo, tu misma sabes que uso mi don en escasas ocasiones. Por eso, no tiene por que ser un don, aunque pueda tenerlo... Eso tampoco es que me preocupe demasiado Jejeje- rió despreocupado y alegre.
- Tienes razon Kyle, pero para que buscar a un simple predicador? Porque razon su Santidad queria contactarlo?
El maestro cambio su expresión por una realmente seria... pasaba algo eso no era normal en el.
- No creo que haya ninguna clase de problema que te lo cuente a ti, eres una persona en quien confío plenamente... además al dirigirme hacia aquí he oído rumores pro el pueblo, por lo tanto lo que me extraña es que dichos rumores no llegaran a tus oídos...
- Maestro, para ser sincera, incluso a este convento han llegado rumores, cotilleros del pueblo. Dicen que se han robado algo del Vaticano, lo cual me parece una ofensa! No es cierto eso verdad Kyle?
El sequedó en pleno silencio... albergando en mi dudas sobre dichos rumores...
- Pero... es que acaso eso es verdad? Quien se ha atrevido a mancillar al Vaticano? Que se han robado del sagrado recinto de sus Santidad? -pregunte muy preocupada.
- Documentos... documentos muy importantes referentes a un objeto santo- seguía serio- El Santo Grial
Pero el caliz sagrado era solo una leyenda...
Guarde silencio, estaba demasiado conmocionada para hablar y mi mente turbada no me permitia el habla.
-El predicador Cain -comenze a hablar lentamente- Tengo informes que esta en Napoles...
El maestro se levanto y me ofrecio amablemente su mano.
- Ese caliz existe en verdad, mi querida Dolores...Partiremos hacia Napoles pues... y seria un plazer que me acompañaras- me dedico una tierna sonrisa.
- Si Kyle -murmure, no podia creer que el Santo Grial existiera.
El maestro regreso a al Vaticano y yo con el, comenzaron los preparativos para nuestra partida, nos iriamos en un par de horas. Encontrar al predicador era urgente, pero lo era aun mas localizar el Grial y entregarselo a la Iglesia, de otra manera... podria caer en manos de pecadores y la Sagrada Iglesia catolica, la unica religion verdadera del Mundo, correr grave opeligro.
Cuando la luz del nuevo dia iluminaba Roma, el carruaje del Cardenal comenzaba su viaje a Napoles.
Lastima, no habia tenido la oportunidad de ver al Santo Padre....
OUT: Mil gracias a Aki x rolear!!!!!!! Kyle es taaaaan mono!!!!
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