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jueves, enero 03, 2008










No era capaz, aún, de explicarme a mi mismo lo que había sucedido con aquella hereje, Rosalyn. Sin embargo, cuando salía de las mazmoras solo quería hacer una cosa. Evitar que la mataran. Desconocía lo que me impulsaba a ello y, aunque ese tipo de actos no eran propios de mi, al final fui a buscar a Kyle. Él iba a ayudarla, estaba seguro, fue por eso por lo que hablé con él. No iba a darle explicaciones. Ni siqueira las tenía para mi. Pero debía... no, tenía que ayudarla.
Así pues, esperé en el lugar donde Kyle me habia indicado. Me aseguré de que nadie entrara en las mazmorras, para luego hacer que nadie se acercara al lugar en el que yo estaba. Alguna monja que pasaba por allí, me miraba asustada, y luego se marchaba. No era una persona agradable para ellas... Entonces la vi, caminaba con cuidado hacia donde yo estaba, intentando no hacer ruido hasta que se acercó a mí.
-Bien pues... démonos prisa.-Le indiqué, luego me giré.

Ella no se movió.
-¿Porque haces esto?-susurró.
-Porque Kyle quiere salvarte.-Mentí.-Ahora, vámos.

Esta vez ella si avanzó en silencio.
-... Al parecer familiares tuyos nos esperan.-Dije poco después.
-¿Familiares mios? ¿Quien?-preguntó ella confusa.
-Tus... ¿primos?-Respondí, evitaba mirarla.- No estoy muy seguro. Luego debo escoltaros hasta que... las fuerzas de la iglesia no puedan haceros daño.
-Sienna.. Jillian...-murmuró ella.-Sigo sin entender porque me ayudas.
-Repito que Kyle quiere que estés bien. Y yo ayudo siempre a mi hermano mayor.-Volví a mentirle, de pronto no paraba de pecar.
-Aunque eso signifique traicionar a otro hermano...
-... No hace falta que me recuerdes eso. ¿De acuerdo?-Miré hacia el cielo y pensé.- Augusto... me matará.
-Deberías haberte camuflado o algo.-Comentó Rosalyn.-Si nos descubren...
-¿Yo?-Pregunté, luego sonreí.- Es normal que me vean por aquí, lo que no lo es tanto es que ande acompañado por alguien como tú. Pero... no se atreverían a preguntarme nada.
-Bueno...-dijo ella bajando la cabeza. Tras eso continuó caminando

De repente se paró en seco y tropezó, agarrándose a la pared para no caerse.
-Ay...
-¿Qué pasa?-Me giré rápidamente y como acto reflejo la sujeté, ya que vi que iba perdiendo fuerzas para continuar en pie.-
-Mi pie...
-¿De nuevo?-Pregunté.- Bueno, de todos modos una herida así tarda siempre en curar, por muchos tratamiento que se reciba.... ¿Te llevo?
-¿Qué? No no no no no no no.-dijo negando rápidamente con la cabeza y sonrojándose.-Yo puedo yo puedo...

Comenzó a caminar, pero de pronto el pie aparentó dolerle mucho por lo que acabó perdiendo fuerzas en esa pierna y se cayó. Me acerqué, la miré fijamente, para luego agacharme y quedarme cara a cara con ella. Aunque el dolor era visible en su rostro, era aún más perceptible el rubor en sus mejillas.
-Rosalyn...-susurré.
-Que...
-No deberias ser tan cabezota si... no puedes andar. Yo te llevo y no hay nada más que hablar, ¿de acuerdo?-En realidad, no era una pregunta sino una orden.
-Esta bien..-se resignó.

La ayudé a ponerse en pie, para luego tomarla en brazos. Evitaba mirarla todo el rato, mis ojos estaban fijos en el frente y estaba intentando salir por una zona por la cual nadie solía ir. Nos encontramos con dos personas por el camino, pero ninguna fue capaz de mirarme si quiera, si estaban yendo por allí significaba que no estaba haciendo "nada bueno". Llegamos al lugar donde sus primos tenían que esperarnos y miré a mi alrededor. No había llegado nadie, aún... Sin embargo, accidentalmente mis ojos quedaron fijos en los suyos.
Ella pestañeó sorprendida y volvió a ruborizarse.
-Esto... gra.. gracias Gin..
-No hace falta que me des las gracias.-Respondí, aunque aparentaba estar muy seguro de mi mismo en realidad... en aquella situación me sentía muy extraño.- ... ¿te encuentas mejor...?
-Si...-murmuró ella.-Al no andar el dolor.. calma.
-Me alegra... oir eso.-La dejé sobre una roca, por un momento nuestras caras estaan muy próximas, sin embargo, entrecerré los ojos y me aparté.
-¿De veras vas a acompañarnos?-preguntó Rosalyn de repente mientras se acariciaba el tobillo adolorido.
-Ajá.-Respondí dándole la espalda.- Tengo que estar seguro de que podeis escapar sinque os busquen.
-Kyle y tu podeis meteros en un lío muy gordo por ayudarme...
-Ya lo sé... Pero a Kyle le gustan los líos si cree que lo hace por algo justo.-Miró al cielo.- Y a mi... Me da igual.
-Oh... bueno...-dijo ella sin mirarme.
-Aunque... creo que Augusto jamás se enterará.
-Pues yo creo que cuando preparen la hoguera... algo se notará.-Dijo con algo de cinismo.
-No se enterará de que te ayudamos Kyle y yo.-Espeté, luego la miré de reojo.
-Eso me... alegra..-dijo ella mirándome también
-Para él habré ido a por ti. Pensará que le traeré tu cabeza muy pronto, en una bandeja.-Me fui girando hacia ella.

Rosalyn me miró con los ojos muy abiertos y se hizo unos centímetros hacia atras.
-¿Que?
-¿Que de qué?
-Que... Su Santidad.. cree que le llevaras mi cabeza...
-... Pero no lo haré. ¿Estás pensando que te voy a entregar a él?

Ella agachó la cabeza evitando mi mirada.
-Perdona... soy una desagradecida...
-... en realidad es normal que pienses eso pero...-me acerqué y me agaché, hasta estar frente de ella.- ¿de verdad crees que yo haría algo así?

Ella me miró a los ojos, le temblaban... ¿miedo quizá?
-Bueno yo... entiéndeme...
-¿Que te entienda?-De pronto me sentí ofendido.
-Quiero decir que... nunca nadie ha hecho algo asi por mi y...
-... y... -Quedé cara a cara con ella, agachó la cabeza pero hice que la levantase.- ... y... crees que esto es una trampa. ¿verdad?
-Bueno... esto.. yo...-intentó volver a agachar la cabeza pero no la dejé.
-¿Tú qué? ¿No confías en mi?-Pregunté, pero no la dejé responder.- Crees que estamos jugando contigo, ¿eh?

Noté como ella se ponía nerviosa y evitaba mirarme a los ojos.
-¡Mirame a los ojos Rosalyn! ¿¡Es eso!?

Ella clavó sus ojos en mí.
-Mas... o menos.-contestó con un hilo de voz.
-Pues.... ¡Te equivocas!-Respondí. Estaba muy enfadado, el hecho de que dudase de mi... Normalmente ese tipo de asuntos de daba igual pero en aquel momento no me era indiferente. Con la mano con la que sujetaba su cara, acaricié su mejilla.

Ella me miró y una lágrima se derramó por su mejilla.
-Perdóname...
-Rosalyn...-musité, luego quité la lágrima.- Me molesta que... tú dudes de mi...
-Lo siento mucho.. de verdad Gin...-dijo ella.-Se que no es agradable que duden de ti, pero siendo los hermanos del papa, que os arriesgueis tanto por una hereje... de verdad, perdóname.
-... Pues... no vuelvas a hacerlo.-susurré.
-Si.. vale..

Tenía mis ojos clavados en los suyos, noté como el rubor de su rostro aumentaba a medida que el tiempo pasaba y yo la miraba fijamente. Estaba en un error, no podía hacer lo que estaba haciendo. Ayudaba a una hereje, besaba a una hereje y... me estaba dejando guiar por unos instintos que creí olvidados. Sin embargo, de nuevo tener aquel rostro tancerca de mi, aquellos cabellos dorados y esos ojos azules... esa sonrisa dulce. Todo en ella me parecía tentador... me acerqué lentamente, hasta que la besé. La besé profundamente, como nunca. Acaricié su cabello suavemente. No debía continuar con aquello pero... no me podía contener. ¿Esto es eso a lo que llaman lujuria?
Ella también me besó de una manera muy tímida y tierna, posó su mano en mi hombro y cuantos mas segundos pasaban mas apretaba su mano agarrando mi hombro, como si se pusiera nerviosa.
Me Separé levemente, clavando mis ojos en los suyos. Ahora estaba mucho más sonrojada, sin embargo, me gustaba verla así.
-Rosalyn...-susurré.
-....¿Si?-dijo ella bajando la mirada.
-... esto....-respondí, hice que me mirase pero en ese momento la solté y me puse en pie.

Estaba haciendo tonterías.
Debía llevarla con sus primos y escoltarles.
Nada más.
... Gin...

Extendí mi brazo hacia ella, la tomé en brazos y comencé a caminar en busca de sus familiares. Según lo que me habían dicho debían estar por allí. De repènte de fondo se oyeron unos berridos.
-¡¡EL CARDENAL KYLE NOS ESTAFO!! ¡Dijo que Rosy saldria!- chillaba una chiquilla, no hay dudas, ellos eran sus familiares...supongo.
-¿Sienna?-dijo Rosalyn.

Ambos sujetos se giraron hacia nosotros , centrando su atención en Rosalyn. La miré. Al parecer sí que eran sus familiares, así que con cuidado la dejé en el suelo. Luego mis ojos pasaron hacia aquella muchacha y aquel tipo.
-Ros....-la niña me miro enojada.- ¡¡TU!!
-¿Yo qué?-Gruñí.
-¡¡Sienna!! ¡¡Jillian!!-Rosalyn le smiró con alegría.
- ¿¡Que te crees que etsas haciendo con mi primaaaaa?!-se abalanzo hacia mi apartanndome de ella y acaparandosela.- Rosyyyyyy-lloro- ¿Estas bien?
-¿¡Eh!?-Grité. Miré a aquella tal... Sienna supongo. Era una... ... ... -....
-Sí, muy bien, gracias a el cardenal Kyle y a Gin.-sonrió Rosalyn mientras abrazaba a sus primos.
- El cardenal Kyle dijo que vendría...-miro a su prima- los cardenales dan asco epro ¡Me fio de el!
-Gracias por la parte que me toca.-farfullé mientras me cruzaba de brazos y miraba hacia otro lado.
- Y tu eres ... - me preguntó aquel tipo , con cara algo confusa , sin soltar aun a Rosalyn -
-Gin... Mi hermano es el Cardenal Kyle.-Respondí.- Vine en su lugar y os escoltaré para que podais marcharos sin problemas.

La niña me miro desafiante.
- No me fíobde ti, no me fíod e ningun cardenal, me dais asco y ademmas pareces de la guardia
-Sienna.-interrumpió Rosalyn.
-Tsk...-Reí amargamente mientras miraba hacia otro lado.- No he venido para que te fies de mi. He venido para ayudar a Rosalyn y punto.
-Puedes fiarte de Gin Sienna...-dijo Rosalyn mirándome.
- Pero si parece un cabeza hueca- acaba de conocerme ys e pone a juzgarme...¿Pero quien se cree que es?.- ¡Y no se parece al cardenal Kyle, seguro que miente!

La miré por un momento, serio, luego me eché a reir mientras miraba al cielo.
- Se....esta.. riendo...¡¡¡DE MI!!!- dijo apretando los puños.
-...-Mi risa se detuvo, sin embargo, continué riendome aún más.

Parecía que la ponía de los nervios riendome así. Rosalyn se acercó a su primo y se cogió a él.
-Esto.. ¿nos vamos Jill?
- ¡ c..c.l.claro ! A..aqui ya no hacemos nada ! - de repente se había sonrojado ... - ¡ Sienna y Gin , en marcha ! - me llamó como si me conociera de toda la vida , maldito tipejo ...
-¿Qué?-pregunté, clavando mis ojos en mi.

Sin embargo, luego suspiré y me acerqué al tal Jill y a Rosalyn, ignorando a Sienna, la cual al ser ordend e Jillian obedecio sin protestar.
- to..toma ... - Jillian se habia quitado su gabardina y se la ofrecia a Rosalyn , aun sonrojado.
-¡Ya deja de ser tan cortado! ¡Que es mi prima! Not e va a comer -¿es que esta niña solosabía protestar?
- ¡ Yo no soy cortado ! y conozco perfectamente a Rosy.¡ ROSALYN ! ¡ argh al final acabas liandome Sienna ! - le protestó él .Parecia que ya estuvieran acostumbrados a las disputas . Se ve que era algo habitual en ellos , que escandalosos este par ...

La niña de repente miro a ambos desconfiadamente.
- Rosy, es...MIA - dijo abrazandose a ella.
-Gracias Jillian.-Dijo Rosalyn mientras cogía el abrigo de su primo y se lo ponía.-Deberiais dejar de discutir ya chicos.
-Pero eres mia...y Jillian también- entonces me miro.- ¡Tu no tu puedes perderte!
-¿Decías algo, insecto?-pregunté.- Es que como estás tan abajo no te oigo.
-Gin...-murmuró Rosalyn.
-Disculpa.-Me refería Rosalyn, luego miré hacia otro lado.
- ¿In...secto?-silencio.- ¡Que pueda adoptar habilidades de animales, note da derecho a llamarme isnecto! Además tengo 17 años

Ni la miré. Aunque me estaba provocando y yo era capaz de estar discutiendo con ella durante años, no estaba allí para eso, por lo que continué mirando hacia otro lugar, en silencio.
-Por cierto...-cambio de tono.- ¿Donde vamos?
- lo primero es alejarnos de aquí , tal como nos dijo Kyle ... - le respondió Jill . seguidamente me miró - has dicho que vienes con nosotros,¿no? ...
-Sí. Tengo que asegurarme de que podeis alejaros sin problemas.-Le contesté, mientras le miraba.
- ... supongo que no serás tan tonto de ayudarnos ahora , para que cuando vuelvas te chives de todo esto ... - me miró algo extrañado y desconfiado - sabes lo que quiero decirte , ¿verdad..? No nos queda mas remedio que fiarnos de ti ... te agradezco que hayas ayudado a Rosalyn , pero seré franco , Kyle me dió mas confianza que tu ...
-Digamos que es el hermano mas simpático. ¿te vale asi?-respondí.- De todas formas no estoy aquí para que tú o Sienna os fieis de mi. Solo para asegurarme de que Rosalyn escapa.

Rosalyn me miró y susurró un gracias silencioso que solo yo vi.
-¿Y luego?¿Volveras solo?... Pueden acusarte de complicidad..-dijo Sienna despreocupada
-Lo dudo.-Respondí.
- Entonces?
-No tengo nada que perder.-Dije, con una sonrisa.

Siena me miró, parpadeo y se rio.
- Me caes mal, pero eres simpatico.
-Pf...-Miré hacia otro lado mientras me cruzaba de brazos.

A medida que comenzabamos a caminar y, por tanto, a avanzar, empezaron a hablar. Personalmente desconecté de aquella conversación y miré hacia el lugar contrario al que se encontraban. Supongo que hacia tiempo que no se veian y tenian que hablar, pero Jillian... Por un momento le miré, pero mis ojos volvieron a mi izquierda. Él... quizá eran cosas mias. No debía pensar en ello. Por otro lado Sienna me desquiciaba... ... Supongo que será un viaje largo.

Out: Gracias a Rosalyn, Sienna y Jillian