
Creí que no iba a ser posible, pero finalmente él aceptó. Aceptó revivir. Aunque pude sentir que Kyle prefería, ligeramente, estar muerto.
Cuando terminó el funeral, eché acorrer entre la gente en busca de Gin y Augusto. El entierro sería privado, sólo estarían ellos dos. Debía decirles lo que iba a ocurrir. Tenía que decirles que al fin lo conseguí.
Ya en el cementerio, pude verles en una de las zonas más privilegiadas de aquel lugar y me acerqué, corriendo al principio y caminando después. Augusto y Gin miraban fijamente el ataúd, mientras sus cabellos eran ligeramente mecidos por el viento. Me acerqué poco a poco, con paso suave. Cuando llegué a ellos, Kyle también estaba cerca, observándolos, y aunque por un momento intentó tocarlos fue en vano. Los atravesaba.
Augusto tenía una mirada acristalada, que aunque en un primer momento podía parecer fría, estaba cargada de sentimientos, fijaba enrojecida la mirada en el ataúd sin pronunciar palabra.
Unos segundos después se giró hacia mi y me saludó intentando forzar una sonrisa. Gin, por su parte realmente parecía que no se había dado cuenta de mi presencia hasta que hablé:
-Tengo algo que deciros.
Levantó su mirada, que aunque aparentaba no expresar nada en él aquello reflejaba seriedad, mucha seriedad. Su mirada no era la misma, parecía estar sin vida. Llevó sus ojos a su hermano, para luego volver a mirarme.
-Están destrozados...- no sé de que se asombraba Kyle.
-¿Que ocurre?- preguntó Augusto en un susurro.
-Lo conseguí.-me limité a decir, luego le miré significativamente a él, para luego mirar a Gin.- Lo que te dije Gin, en la sala... Ocurrirá.
Gin abrió los ojos con fuerza, demostrando algo de emoción después de varios días. Colocó sus manos en mis hombros, como un acto reflejo y preguntó:
-¿Traerlo de vuelta?
-¿De qué estáis hablando?-preguntó Augusto desconcertado.
Cuando Gin se dio cuenta de que me estaba tocando, me soltó y luego se giró hacia Augusto, aún agitado. Se calmó poco a poco, luego murmuró:
-Adara dijo que traería de vuelta a Kyle.
-¿Traer de vuelta?-volvió a preugntar.
-Revivir.-Susurré, mirándole a los ojos.
Augusto abrió mucho los ojos y los clavó en mí.
-Me prometiste que no volverías a utilizar tus poderes ¿recuerdas? Ni siquiera para...
-Ya lo había hecho.-respondí, luego entrecerré los ojos.
-¿Augusto lo sabia? -preguntó Kyle.
-Sí, lo sabía.-le respondí a Kyle, mirándolo. Luego giré mis ojos a los otros dos hermanos, que me observaban fijamente.
-Vaya por dios cuanto secretismo que hay en esta familia-rió el espectro.
-Adara.. ¿qué...? - Era la primera vez que Augusto se quedaba sin palabras
.-Vaya...-murmuré, luego me llevé la mano a la cabeza mientras lo miraba.- Es cierto, vosotros no podeis verlo.
-¿Ver a quien?-preguntó Gin, luego me miró preocupado.
-¿te encuentras bien Adara?-preguntó Augusto.
Kyle se coloco entre los dos y los tomo de los hombros como si pudiese tocarlos.
-Nunca fui tan invisible-rió Kyle.
No pude evitar reir, sin embargo pronto recuperé la seriedad y los observé a ambos.
-Kyle está aquí.-anuncié.- Pero no podeis verlo aún.
Augusto y Gin se miraron.
-Debes estar agotada Adara, deberias descansar y no forzarte tanto con tu trabajo...-dijo el Papa
-¿Es más creible que pueda revivir a gente que pueda ver a los fantasmas?-pregunté, fijando mis ojos en él.
-Me siento obserbado-añadio Kyle.
Gin abrió la boca, pero no dijo nada y miró a su hermano, extrañado.
- Mucho más observad-dijo Kyle mriando al uno y al otro que se miraban pero como estaba en medio recibia ambas mriadas
Augusto también lo miró a él.
-Dejad de miraros como si yo estuviese loca.-protesté, mientras no pude evitar reir por la cara de Kyle.
-Perdona Adara...- se disculpó mi amigo.
Gin continuaba mirándome raro, con la boca abierta. Me encogí de hombros y observé a Kyle, como indicándole que podía volver cuando quiese.
Kyle sonrio y se dirigió hacie el ataud.
-Podrian abrirlo, no quierod espertarme ys entirme encajonado
Asentí con la cabeza y yo misma me dispuse a abrirlo, tras un rato lo conseguí sin ayuda a pesar de que Augusto y Gin intentaron hacerlo por mi en más de una ocasión.
Kyle se miro a si mismo, se sentia raro al verse ahi, palido y cone xpresion de serenidad, durmiendo placidamente.
-Oh...llevo parche...
-ajá.-murmuré.
Se rió y lentamente su mismo cuerpo, lo abdujo lentamente.
Nada más hacerlo, oí un ligero tintineo y una onda azul salió de él, traspasándonos a todos. Por segunda vez, escuché el tintineo y noté algo en mi interior. Algo extraño. Los sentimientos que antes me invadían se hacían más fuerte. La respiración se me aceleró y entrecerré los ojos suavemente. Miré a Gin y luego a Augusto, quizá pudieron ver algo "extraño" en el cuerpo de Kyle pues lo observaban fijamente.
-¿Lo has visto?...-murmuró Gin.
-¿Tu también?-contestó Augusto.
-S... sí.-susurró Gin, se hizo el pelo un poco hacia atrás.
Y el cuerpo que hace segundosse encotnraba sin vida se reinclino llevando su mano a la cabeza.
-Que mareo...-su voz sonó algo ronca.
-¡AH!-Gritó Gin, luego lo señaló.- está está está está está está está está está...
-Cálmate Gin...-musitó Augusto.
Kyle miro a sus hermanos menores, arqueo una ceja y no pudo evitar decir:
-¿BU?
Gin se calmó, mientras observaba a Kyle después de decir "Bu". Apretó los dientes, se acercó con paso lento y le dió un capón a Kyle.
-¡¡Gin!!-recriminó Augusto.
-Eh que tengo resacón, no hagas eso-bromeo.
Kyle Intentó levantarse, no dominaba demasiado bien sus movimientos terrenales de nuevo.
Gin lo empujó levemente, sin embargo luego lo abrazó mientras se mantenía en silencio. Les miré y sonreí, luego llevé mis ojos a Augusto. Augusto se acercó y le ofreció apoyo.
-Es mejor que vayamos.. adentro.-dijo sin apenas mirar a su hermano.
Kyle al igual evitaba mirar a Augusto a la cara.
-Ya...
Tanto Augusto como Gin le ayudaron a entrar, yo les seguía.
-Estoy bien, estoy bien.
-Pero aún así deja que te ayudemos.-murmuró Gin, luego lo miró de reojo.
-Lo siento
-No hay nada que sentir.. hermano.-murmuró Augusto aun sin mirar a su hermano mayor.
-¿Qué hara sus antidad?
-¿Sobre qué?-preguntó él mirñandole por primera vez de soslayo.
-Sobre el traidor excelencia.- seguia sin mirarle, aparte de que augusto estaba en el lado carente de vision.
Augusto levantó la mirada y aceleró el paso, alejándose de nosotros. Kyle le vio marchar sin mediar palabra. Le miré avanzar y entrecerré los ojos, mientras continuaba siguiéndoles a una distancia prudencial.
- Cambiare, lo prometo-dijo a Augusto mientras aún podía oirle
Augusto se paró en seco y giró levemente la cabeza.
-No hay nada que cambiar Kyle...
Gin levantó la cabeza y miró a Augusto, igual que yo. Luego agaché la cabeza mientras continuaba andando y escuchando.
Kyle entro a su habitación tanteando, mientras Augusto se dirigía hacia su despacho.
Gin observó como uno y otro tomaban caminos distintos. Yo me quedé frente a él y me miró a los ojos.
-Dile a Kyle que me voy a mi cuarto.-susurró, abrumado.- quiero dejarle descansar, así que si me necesita allí estoy.
-De acuerdo, pero Gin...-murmuré, me sentía mal.
-¿Si?-preguntó, después de haber comenzado a andar.
-... nada...-respondí, mientras miraba hacia otro lado.
Tras unos segundos allí afuera, toqué a la puerta de Kyle. Nadie contestó así que entre, Kyle estaba estatico mimandose al espejo con el parche quitado.
-Kyle...-susurré.
Me miró, tenia una profunda cicatriz en el ojo.
-Las heridas cicatrizaron...
-n... no pude hacer más.-musité, luego agaché la cabeza disgustada.
-Así me gusta...- se agacho tendiendome los brazos sonriedno, como siempre.
Me acerqué lentamente a él, para luego levantar la cabeza y observarle su único ojo. Kyle me abrazó hacia el y susurro:
-Voy a cambiar Adara...Muchas cosas sobre mi ... cambiaran ...
-¿Cambiar?-dije, en voz baja mientras yo también le abrazaba.- ¿Como qué?
- No lo sé, estoy confuso...
-Quizá necesites descansar un poco. Yo te cuidaré, ¿de acuerdo?
-No es necesario, ve tu a descansar, estare bien aquí
-Kyle...-murmuré, mientras rozaba un poco su rostro con mi mano. Luego ladeé la cabeza.- Estás realmente agotado y es normal, descansa.
Asintió.
-Pero tambien tu.
-Bueno...-murmuré, pensativa pero luego asentí con la cabeza.
-Ve, prometo que descansaré, pero prometelo tu también.
-Lo prometo.-dije, luego sonreí ampliamente.
Kyle me atuso el pelo, y se retiro hacia la cama , para cerrar los ojos y quedar como hace excasos momentos parecia estar, sumido en un profundo sueño.
Le miré fijamente y no pude evitar sonreir, luego me giré hacia la puerta del cuarto y antes de irme, susurré:
-Si necesitas algo sólo vete a mi cuarto.
Aunque también me di cuenta de que podía saberlo "de otra manera"...
Out: gracias a Augusto, Kyle y Gin
Maddy empezó su búsqueda a las 9:23 p. m.